domingo, 23 de septiembre de 2012

PEQUEÑA SEMBLANZA DE AMOR.

   En el silencio de la noche, adherida a mi espalda, la siento inerte. No respira - pienso, y me da miedo.
   Es una bolita blanca, su pelo ¡tan suave !su pelo de seda y sus ojos negros que muestran asombros. Huele a limpio.
   Se ha convertido en una prolongación de mí misma. Es extremadamente cariñosa y vive hambrienta de caricias.Pareciera abandonarse a todo aquel que le regala mimos , pero sólo es espejismo pasajero. Vuelve a mí , una vez y todas las veces.
   Su mayor alegría es la plaza que tengo enfrente. Le saco la correa y se convierte en un manojo de ansias. Corre como una liebre. Levantan vuelo las palomas, aturdidas y LUNA, mi pequeña caniche está feliz. dibujando jazmines en el aire. Va de planta en planta. en eterna danza.
LUNA, mi amparo, mi alegría, mi sostén.
   Es lo más que puedo darle : el gozo de abrazar la libertad.Ella  no pide, no espera nada. Vuelve del corto paseo, triunfante y cansada, oliendo a hierba.Bebe de su agua a borbotones y se convierte en una mancha blanca sobre mi cama.
   Duerme, acunada por las notas de la música de violines que tanto me gusta. Cesan los ruidos y mientras escribo. pienso en LUNA, mi pequeña caniche toy, que me ama incondicionalmente.
   Ahora soy quietud gozosa abandonada al oro derretido del amor.